Niños coléricos, irritables, enérgicos, con dificultad para concentrarse en alguna actividad específica, muy inteligentes, pero a la vez con conflicto permanente en las aulas de Colegio, es un patrón cada vez más común en la población infantil, el apoyo de la psicoterapia es necesario, la conducta que deben adoptar los padres es clave para la adecuada orientación de niños muy activos, conjuntamente con las siguientes recomendaciones para mejorar el comportamiento de los niños:
1. Reduzca el consumo de azúcar: Si su niño es muy activo e hiperquinético, debe balancear muy bien la dieta, cada vez que da azúcar a su niño es como ponerle una carga extra de combustible, lo que genera un niño más enérgico, inflama su estómago y lo coloca más irritable, prolongando más las horas de vigilia sin que se duerma fácilmente, recuerde que existe endulzantes naturales como Stevia, agave o la fructuosa proveniente de las frutas, que se asimilan mejor y no generan los efectos nocivos del azúcar. Evite chocolates y dulces ácidos.
2. Evite la sobre exposición a pantallas: Según un neuropsicólogo americano los niños no deberían exponerse a pantallas de celular hasta los 12 años, por las radiaciones y la adicción que generan las mismas, la sobre exposición a pantallas generan un cambio en el cerebro del infante, lo cuál dificulta su capacidad de concentración y de motricidad, establezca horarios, donde combine actividades lúdicas, artísticas y deportivas, que permitan que el niño se concentre, exigiendo esfuerzo físico y mental.
3. Establezca horarios de descanso: Los niños que tienen conductas hiperactivas, deben tener fijado un horario de descanso, si se encuentra en etapa escolar es necesario establecer una hora fija de dormida, ideal 8PM, apague todas las luces, desconecte todos los equipos electrónicos de su alcoba, el horario de la cena no debe ser superior a las 7PM, comida liviana, acompáñelo a la cama con un cuento y con aromáticas relajantes de manzanilla o cedrón que lo ayuda a conciliar el sueño.
4. La importancia de suplementar Omega 3: Los ácidos grasos esenciales son nutrientes que se deben buscar en la alimentación porque el cuerpo no los produce, son el principal alimento del cerebro, e influyen en toda la neuroquímica cerebral, existen estudios neurológicos que recomiendan la suplementación de ácidos grasos Omega 3 para el adecuado crecimiento y desarrollo infantil, y el déficit de los mismos puede influir en la parte comportamental del infante.
5. Module el comportamiento del niño con esencias florales: Existen medicamentos de origen natural que ayudan a modular el comportamiento, pensamientos y emocionalidad de los niños, el aconitum se recomienda en niños coléricos e irritables, la manzanilla como relajante y sedante, la esencia de impaciencia para niños reactivos y el Stamonium para miedos nocturnos, busque un jarabe que contenga estas combinaciones para modular la ansiedad de sus niños.